beber tu sangre,
matar por pater noster;
Te vomité con amargura
al amanecer de mi adolescencia;
te busqué en el hueco de la cama:
tibio, del abandono de la esposa...
Ahora ni te culpo:
hacer con tu piel mi tiendae ayudo a saber
por qué has estado tan asustado,
arrepentido.
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